El sector energético argentino cerró octubre con señales contundentes sobre el rumbo de la producción, impulsado principalmente por el desarrollo no convencional en Vaca Muerta.

Así lo refleja el último Informe mensual de indicadores de Oil & Gas Argentina, elaborado por la consultora Aleph Energy, que dirige Daniel Dreizzen.
En petróleo, la producción nacional alcanzó en octubre los 855.000 barriles diarios, un nuevo récord histórico que superó el máximo registrado en 1998. El crecimiento estuvo explicado casi en su totalidad por el shale, con YPF como principal motor de la expansión.
En contraste, el gas mostró una baja mensual asociada a factores estacionales. La producción promedio descendió a 124 millones de metros cúbicos diarios, en línea con el comportamiento típico del último trimestre del año, cuando cae la demanda para generación térmica por el aumento de las temperaturas y un mayor aporte de energías renovables.
El récord petrolero se apoyó en el segmento no convencional, que sumó 21.000 barriles diarios respecto de septiembre. YPF explicó la mayor parte de ese incremento, con una suba de 16.900 barriles diarios, mientras que la producción convencional volvió a retroceder, profundizando la declinación de las cuencas maduras.
La producción de shale oil alcanzó los 573.000 barriles diarios, con un crecimiento mensual del 3,8%. YPF concentra cinco de los diez bloques más productivos de Vaca Muerta, entre ellos Loma Campana, La Amarga Chica y Bandurria Sur.
Por primera vez, La Amarga Chica se convirtió en el principal bloque de shale oil del país, con 88.000 barriles diarios, tras crecer 12,3% en el mes. Loma Campana quedó en segundo lugar y Bandurria Sur aportó algo más del 10% del shale nacional.
Otros desarrollos también mostraron avances relevantes. La Angostura Sur I y Aguada del Chañar, ambos de YPF, registraron fuertes crecimientos, mientras que El Trapial Este, operado por Chevron, más que triplicó su producción interanual tras la puesta en marcha de nuevos pads.
En el mapa por cuencas, la Cuenca Neuquina volvió a consolidarse como el corazón petrolero del país, con 651.000 barriles diarios, equivalentes al 76% de la producción nacional. En términos interanuales, la cuenca mantiene un crecimiento cercano al 20%, impulsado por el shale.
La Cuenca del Golfo San Jorge, en cambio, mostró una leve caída mensual y acumula un retroceso en el año móvil, reflejando el agotamiento de sus yacimientos convencionales. Las cuencas Cuyana, Austral y del Noroeste también exhibieron bajas, aunque en el caso de la Austral el proyecto offshore Fénix aportó estabilidad.
En gas, todos los segmentos mostraron descensos frente a septiembre: el shale gas cayó 13,7%, el tight gas 14,8% y el convencional 3,8%. En la comparación interanual, la producción total retrocedió 6,6%, aunque el no convencional se mantuvo prácticamente estable.
Dentro del shale gas, YPF y Tecpetrol encabezaron el ranking de octubre, con 16,1 y 12 millones de metros cúbicos diarios, respectivamente. En conjunto, ambas explicaron más del 43% del shale gas del país. Sin embargo, las dos compañías registraron bajas mensuales, especialmente Tecpetrol por menores volúmenes en Fortín de Piedra.
Pluspetrol se ubicó como el tercer productor de shale gas, con 11,7 millones de metros cúbicos diarios, destacándose por uno de los mayores crecimientos interanuales del segmento. Más atrás, TotalEnergies, Pampa Energía y Shell mostraron comportamientos dispares, con Shell liderando el mayor salto mensual.
El informe de Aleph Energy confirma que Vaca Muerta sigue siendo el eje central del crecimiento energético argentino, con el shale sosteniendo los récords de petróleo y amortiguando la baja estacional del gas, en un escenario donde la infraestructura de transporte y las decisiones de inversión serán claves para el próximo ciclo de expansión.