Estacioneros rechazan el proyecto de ley que obligaría a reportar las subas en Buenos Aires. Por qué las empresas se oponen a informar los aumentos

La Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines (CECHA) manifiestó su rechazo al proyecto de ley presentado en la Cámara de Diputados bonaerense que busca obligar a los expendedores de combustibles a informar con 72 horas de anticipación cualquier modificación en los precios y a publicitarlos con 48 horas de antelación.
La iniciativa, impulsada por la diputada Ayelén Rasquetti (UxP), cuenta ya con dictamen de mayoría de la Comisión de Servicios Públicos y será tratada en los próximos días en la Comisión de Legislación General, con posibilidad de llegar al recinto en las próximas dos semanas.
CECHA, la entidad que nuclea a los propietarios de buena parte de las más de 5.100 estaciones de servicio de todas las banderas que hay en el país, manifestó la preocupación de diversos actores del sector productivo bonaerense.
Estacioneros y la disputa por los precios
Entre los principales argumentos de la Cecha que explican su posición se basan, en cuatro puntos básicos.
-Riesgo de desabastecimiento: la publicidad anticipada de cambios de precios generaría picos de demanda artificiales, llevando a situaciones de quiebre de stock en las estaciones de servicio.
-Confusión operativa y legal: el proyecto obligaría a exhibir precios futuros, mientras la normativa vigente exige mostrar los valores actuales, lo que generaría confusión entre clientes y empleados.
-Inviabilidad de precios dinámicos: muchas petroleras implementan ajustes variables a lo largo del día para optimizar la demanda, una práctica que resultaría incompatible con la obligación de anunciar cambios con 72 horas de antelación.
-Duplicación normativa: la iniciativa genera una superposición innecesaria con regulaciones nacionales ya vigentes que garantizan la protección al consumidor, el acceso a la información y la competencia en el mercado.
El proyecto sobre la venta de combustibles
El proyecto de ley presentado en la Legislatura bonaerense por el oficialismo es una de las reacciones que comenzó a generar la política de micropricing de las empresas petroleras para el aumento de precios en los surtidores de manera diaria o con periodicidad semanal, sin anuncios formales como venía ocurriendo en los últimos años.
“Los aumentos sorpresivos, de la noche a la mañana, afectan al trabajador, al comerciante, a quien utiliza el auto como herramienta de trabajo para llegar a fin de mes, expresó la presentación del proyecto, en la que se aclaró que “esta ley viene a poner orden donde hoy hay especulación“.
La iniciativa que ya tiene estado parlamentario en la legislatura bonaerense “alcanza a todas las empresas que operan como abastecedoras o expendedoras de combustibles, y busca que se garantice una comunicación previa y clara de cualquier suba de precios, para permitir un mejor control estatal y brindar previsibilidad a la ciudadanía”.
“Las petroleras dolarizaron el precio y en un año triplicaron frente a la inflación. Mientras algunos defienden el mercado sin reglas, nosotros defendemos a los consumidores, que no pueden seguir siendo la variable de ajuste de las petroleras ni de los grandes operadores del rubro”, agregó la diputada.
Fuente: iProfesional