z.system

En el 5° Congreso Latinoamericano de Perforación, expertos de Pan American Energy y CGC destacaron cómo las nuevas herramientas digitales mejoran la eficiencia y reducen los riesgos operativos.

La gestión de riesgos en la industria del petróleo y gas está viviendo un cambio de paradigma. Así lo expresaron especialistas de Pan American Energy (PAE) y Compañía General de Combustibles (CGC) durante la mesa redonda realizada en el marco del 5° Congreso Latinoamericano de Perforación, Terminación e Intervención de Pozos, organizado por el IAPG en la AOG Expo 2025.

Bajo el eje “Optimización y eficiencia de los controles organizacionales y administrativos en la gestión de riesgos”, los expositores mostraron cómo la digitalización de procesos, el uso de tecnologías como GPS y reconocimiento facial, y el fortalecimiento de la cultura organizacional son hoy pilares claves para una industria más segura y eficiente.

“Cuando hay que hablar mucho sobre algo es porque no está tan claro. Hay que diferenciar entre peligro y riesgo”, reflexionó Pablo Barone, de CGC, moderador del panel, al señalar que la industria ocupa el cuarto lugar global en tasas de fatalidad. A su vez, reconoció que se ha avanzado mucho gracias a controles efectivos.

Uno de los momentos más destacados fue la presentación de Esteban Costabel (PAE), quien mostró un sistema de control que integra GPS, reconocimiento facial y bases de datos actualizadas para asegurar que sólo personal certificado y habilitado opere maquinaria como manipuladores telescópicos. La automatización permite controles en tiempo real, incluso para contratistas en distintos turnos.

La ingeniera Krenz, también de PAE, profundizó sobre la gestión de tareas implementada en la vicepresidencia de perforación, completación e intervención: “Buscamos garantizar que las tareas las realicen personas competentes, capacitadas y habilitadas. Eso es un control real, no sólo documental”.

Desde CGC, Díaz compartió la experiencia de migrar todos los procesos de seguridad, salud y ambiente del papel a plataformas digitales. El punto central fue la aplicación de la técnica TAS (Técnica de Análisis Sistémico de Causas), que permite profundizar en las causas reales de los incidentes, superando modelos clásicos como el árbol de causas o los “cinco por qué”.

“Esto no es solo tecnología, es un cambio cultural profundo”, explicó, subrayando que la digitalización permite sistematizar aprendizajes y prevenir incidentes con mayor eficacia.

Por su parte , Barone puntualizó: “Un incidente siempre refleja el fracaso de la gestión de riesgos. Hay que aprender de las pérdidas y enfocar los esfuerzos preventivos en los eventos de alto potencial de fatalidad”.

La jerarquización de controles fue otro de los temas clave. Mientras las barreras “duras” (como eliminación o sustitución del riesgo) son más efectivas, muchas veces la industria se apoya en controles administrativos, menos confiables. Promover una cultura que priorice las barreras más robustas y efectivas es uno de los desafíos actuales.