Con ventas de 0km que crecen, los precios en pesos y dólares fueron corriendo en diferentes sendas. La pregunta es: ¿conviene comprar hoy?

El mercado automotor se encuentra en pleno crecimiento, con patentamientos que pasaron de unas 400.000 unidades en 2024, a proyecciones de ventas que superan las 600.000 para fin de año.
Este escenario vino acompañado de una mayor oferta de productos y de créditos que acompañaron a los clientes para flexibilizar la compra de autos.
Junto con estas oportunidades que se fueron abriendo, los precios de los 0km fueron viviendo dos escenarios: por un lado, en pesos están cada vez más caros, y llegar a un modelo nuevo implica desembolsar más de $22 millones, que es el valor del más accesible, que es el Renault Kwid.
Por otro lado, por la suba del dólar, en esta moneda los valores de los vehículos son cada vez más accesibles, y quien quiera comprar ahora un 0km pagará menos que hace unos meses.
Los autos más vendidos, más baratos en dólares
Como para tomar una referencia, los tres 0km más vendidos del año son Fiat Cronos con 23.924 unidades vendidas entre enero y agosto; Toyota Yaris con 22.981 patentamientos; y Peugeot 208 con 22.901.
En cuanto a precios, en enero de este año, el Fiat Cronos de entrada de gama salía $22.478.000, y con un dólar oficial de $1.059, el valor quedaba en u$s21.225. Hoy, la misma versión sale $27.959.000, y con un dólar que promedia los $1.485, sale u$s18.827. Es decir, bajó más de u$s2.300.
En el caso del Peugeot 208, con un valor de entrada de gama de $23.280.000 en enero, en dólares salía u$s21.983; mientras que hoy, con un precio de $28.540.000, sale unos u$s19.280.
El Toyota Yaris, otro de los más vendidos, pasó de $21.660.000 o u$s20.453 en enero a $28.324.000, a u$s19.073 en la actualidad.
De esta manera, comprar un auto hoy es más barato que hace unos meses si se miden en dólares los precios.
Los reclamos de las automotrices
Si bien las automotrices admiten que el Gobierno hizo mucho a favor del sector, con baja de impuestos, reiteran de manera constante que todavía faltan medidas para mejorar la competitividad.
En este sentido, piden cambios con el dólar para que la rentabilidad no siga cayendo, teniendo en cuenta que, aunque fabriquen, mucho tengan que importar.