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Después de que se oficiali­zó el acuerdo de precios que alcanzó el Gobierno con las principales petroleras del país, las empresas aplicaron un aumento del 4% prome­dio en los combustibles que comercializan.

En más de la mitad del país (16 de los 24 distritos) el litro supera los $160 y las diferencias entre los precios por provincia son mayores al 52,2%. Esto es aún supe­rior al relevamiento de no­viembre (fecha en la que fue el último aumento), donde la brecha rondaba el 43%. El valor varía de acuerdo a la ubicación de cada provincia, aunque ya existe una dife­rencia sustancial en el ám­bito de la Ciudad de Buenos Aires y su conurbano.

De hecho, en la Caba el li­tro de súper cuesta 150 pesos en algunos barrios, contra 185 de la premium, mientras que las diferencias también son notorias en los distintos sectores de la provincia.

En la zona sur, por ejem­plo, el litro de súper oscila entre los 160 y 164 pesos, y la premium llega a los 200; en tanto, en el corredor de la zona norte, la súper cuesta 162 y la premium también alcanza los 200.

Luego del último aumen­to, que entró en vigencia la semana anterior, hay 15 provincias en las cuales no se consigue premium por debajo de los 200 pesos por litro. La ciudad de Posadas, la capital de Misiones, es donde se registra el precio más alto, ya que allí cuesta 222,60, y la súper 171. En Córdoba la premium está en 215,40 y la súper 165, mien­tras que en San Juan cues­ta 202 la premium y 150 la súper. Mientras que en Co­rrientes se comercializa a $172, 7.

En el otro extremo está la Patagonia, con los precios más bajos, ya que es produc­tora de hidrocarburos, por lo que no tiene tantos impues­tos sobre los combustibles: la provincia más barata es Tierra del Fuego, donde el li­tro de nafta premium cuesta 153,80 y la súper, 137.

 

Fuente: Norte Corrientes