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Ámbito recorrió el campamento ubicado en el kilómetro 60 de la ruta 151, en Río Negro, donde se preparan las tuberías para unir 583 km. de traza desde Neuquén a Saliqueló. Los trabajos en marcha y cuándo se inaugurará.

La primera etapa del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner que se construye para aprovechar el gas de Vaca Muerta se extenderá 583 kilómetros hasta Saliqueló, en la provincia de Buenos Aires, con una capacidad inicial de transporte de 11 millones de m3 diarios, que con las plantas compresoras pueden llegar hasta los 22 millones.

Ámbito viajó hasta la zona de las obras, fue testigo de los trabajos en marcha y pudo acceder a información exclusiva y relevante de uno de los proyectos energéticos más importantes de los últimos tiempos. Se espera que la obra sea inaugurada el 20 de junio de 2023, Día de la Bandera, en un acto multitudinario junto a las máximas autoridades del país y las provincias participantes, destacadas figuras internacionales, los empresarios involucrados en la construcción y cientos de trabajadores que hoy impulsan un nuevo hito en la obra pública nacional.

Los trabajos para los primeros dos renglones de la obra se extienden a lo largo de 440 km. En total son cuatro. El 1 y 2 lo llevan adelante la UTE integrada por Techint y Sacde, de Pampa Energía. La comitante es la estatal Energía Argentina S.A. El kilómetro cero del gasoducto arranca en la localidad neuquina de Tratayén y avanza 30 kilómetros por Neuquén. Luego traspasa a Río Negro y sigue otros 30 km. A unos 40 km. de Catriel, en el km. 60 de la ruta 151 está el primer obrador: a 300 metros de allí pasa la traza del gasoducto. En el km. 90 se cruza el Río Colorado y luego continúa por La Pampa, donde está ubicado el segundo obrador, más precisamente en la localidad de General Acha. El segundo renglón empieza en el kilómetro 220 y llega al 440.

Las grandes máquinas que se utilizan pesan entre 40 y 50 toneladas. Son equipos mayores como los de izaje, excavadoras y zanjadoras. Algunos son nacionales y otros traídos del exterior. En total son 272 equipos, además de 434 camiones y vehículos y 738 aparatos menores. Para esta parte se necesitará movilizar 1.444 equipos.

En el Gasoducto se trabaja de lunes a lunes. En el PK60 duermen unas 250 personas, que trabajan 25 días corridos con una semana de descanso. El resto va y viene de las localidades cercanas, principalmente Neuquén, que está a una hora y media en auto. Los contratistas prevén que a fines de diciembre y principios de enero tendrán el pico de empleo, con 3.000 personas trabajando de forma directa en el proyecto, más 8.000 indirectas hasta fines de marzo de 2023 en servicios, gastronomía, hotelería y transporte. Hoy trabajan unas 1.500 personas en los dos renglones: 700 en el campamento del km. 60 y 800 en General Acha.

En cada uno de los dos campamentos funciona una planta de doble junta, con tres estaciones de trabajo para la soldadura. La rionegrina es de color verde y la pampeana, amarilla. Estas fábricas desmontables permiten transformar un caño de 12 metros en otro de 24, lo que reduce tiempos y costos. También permitirá a futuro pasar fibra óptica por ese camino. Una vez que está terminado el caño largo de 24, se acopia y más tarde se llevará a la línea (pista) por donde pasará el gasoducto con las pureñas, unos equipos especiales de traslado. Esas cañerías llegan en camión a Río Negro y La Pampa desde la localidad de Valentín Alsina, donde Techint recibe las láminas de acero brasileño, las enrolla y la convierte en tuberías. Según detallaron en el obrador, a cada campamento arriban unos 25 camiones por día con cuatro caños de 12 metros cada uno.

Además de soldar los enormes tubos se avanza con el movimiento del suelo para la construcción de la pista, lo que permite abrir una brecha para después hacer la zanja, transportar la cañería soldada y bajarla. “Es la tarea inicial para la construcción de cualquier ducto…”, especificó Alejandro Cardones, gerente general del proyecto. En la bajada de cañerías, los tiendatubos, unas máquinas especiales para esa tarea, colocan tramos de 1.000 metros de tubos en la zanja.

El inicio de la traza comenzó de norte a sur, desde el km. 440 hacia el Rio Colorado, porque en el oeste de La Pampa la geografía es plana, la tierra más fértil y más sencilla de remover. Al día de hoy ya se llevan construidos 220 km. de plataforma. Recién la última semana de noviembre comenzó la excavación de la zanja en Tratayén. “Es un suelo muy duro, lo llamamos cemento indio. Es rocoso y requiere equipos de gran porte y peso, como la zanjadora de 70 toneladas, que construye una zanja de 1,5 metro de ancho y 2,30 de profundidad…”, detalló Cardones. Para acelerar los pasos, en las próximas semanas serán cuatro los equipos de ese tonelaje trabajando en simultáneo. Así se construirán 2 kilómetros de pista por día por frente de trabajo.

Según anticiparon a Ámbito, a partir de este lunes se comenzará a “presentar” los caños de 24 metros en la pista, al costado de la zanja, para comenzar a soldar con tecnología de última generación importada. “La semana pasada trajimos equipos de soldadura automática desde Estados Unidos. Es la primera que se va a usar en el país y nos va a permitir desarrollar el plan de producción más rápido. Ya terminamos de hacer la calificación y ajuste de los equipos, que están en nuestros talleres en el país y los estamos trayendo al campamento”, comentó el líder del proyecto.

A largo plazo se prevé la construcción del gasoducto entre las ciudades de Mercedes y Cardales, en territorio bonaerense. Pero, además, está prevista la ampliación del Gasoducto NEUBA II, la reversión del Gasoducto Norte que va de San Jerónimo en Santa Fe a Tucumán, la expansión de distintos tramos del Gasoducto Centro Oeste en el Litoral y de otros ramales que llegan al AMBA. Los funcionario a cargo también se entusiasman con aumentar la capacidad de transporte de gas del Noreste, con más obras en Entre Ríos, Corrientes y Misiones y, como si fuera poco -o quizá lo más importante-, llegar con el gas de Vaca Muerta a Brasil.

 

Fuente: Ambito