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Las centrales térmicas del país redujeron la utilización de gas natural durante los primeros 10 meses del año. El gasoil y fueloil ganaron mayor participación. 

Durante los primeros 10 meses del año, las centrales térmicas de todo el país aumentaron la quema de combustibles sucios y, en paralelo, registraron el uso de gas natural más bajo desde 2013. Se trata de una tendencia que se marcó desde hace 3 años y que responde a una serie de elementos que no tiene que ver con la oferta.

En el período mencionado el uso de gas natural para la generación eléctrica fue de 11.486 millones de metros cúbicos (m3), lo que da un promedio mensual de 1.148 millones (m3). Se trata del registro más bajo desde 2013, en el que se usaron 11.007 millones (m3), unos 1.100 (m3) por mes.

Los datos se desprenden de los informes oficiales que elabora la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) por mes, desde 2013 hasta la fecha, y de información procesada por Energía On.

En números

11486
millones de metros cúbicos de gas se utilizaron durante los primeros 10 meses del año en las centrales térmicas.

Antes de avanzar en el análisis del año, vale señalar que esta caída en el uso de gas no tiene que ver con una menor oferta local -algo que resolvió con creces el Plan Gas.Ar- sino que es el resultado de la decisión oficial de priorizar el gas para el uso residencial. De esta forma, las centrales térmicas usan lo que queda disponible y completan con la quema de líquidos y carbón.

Para tener en cuenta, el uso de gas en las centrales, entre enero y octubre de este año, representó el 75,4% de todos los combustibles. El segundo más usado fue el gasoil que abarcó el 13,6%, mientras que el fueloil y carbón el 6,6% y 4,3%, respectivamente.

En números

13,6%
de los combustibles que se usaron para la generación eléctrica en el año fue gasoil.

En contraste, un caso contrario se puede ver en el mismo período de 2018 en el que, no solo hubo mayor demanda (hoy cubierta por renovables, además de una menor actividad industrial) sino que el uso de gas fue superior.

Acorde a los datos oficiales, entre enero y octubre de 2018, el gas natural representó el 88,2% de todos los combustibles que se usaron en las centrales. Además el gasoil, fueloil y carbón cubrieron el 4,8%; 3,2% y 3,8%, respectivamente.


Cómo fue la quema de combustibles sucios en el año


Según el último informe de Cammesa, durante los primeros 10 meses del año las centrales térmicas de todo el país quemaron 2.072.000 metros cúbicos de gasoil. En este caso se trata del nivel más alto para el período en análisis desde 2016.

Esto también está atado a los precios internacionales y es que los líquidos, que normalmente son más caros que el gas, este año mostraron valores más bajos. Con lo cual, a la hora de importar la balanza se inclinó para el lado de los líquidos.

En números

2.072.000
metros cúbicos de gasoil se usaron entre enero y octubre de este año. Es el nivel más alto desde 2016.

Además hay que tener en cuenta la matriz de generación de Argentina está marcada fuertemente por el gas y, a pesar de quemar más líquidos, el país tiene niveles de emisiones sustancialmente más bajos que varias potencias.

Respecto a la quema de fueloil, en el período de análisis se registró el uso en las centrales térmicas más alto desde 2017. Según los datos oficiales, fueron 1.006.000 toneladas en el año. Vale señalar que el récord en este caso se alcanzó en 2015, cuando se usaron 2.705.000 toneladas en el año.

Por último, el carbón mineral también ganó participación entre los combustibles de las centrales este año los datos muestran que se quemaron 669.000 toneladas. Si bien es un 13% más bajo que lo que se registró en el mismo período del año pasado, teniendo en cuenta los registros de 2021 y 2022, se ve que se recuperó una tendencia similar a la que se veía desde 2016 para atrás.

 

Fuente: Rio negro