La nueva generación del muscle car se conoció en Detroit. Habrá dos motorizaciones: el más extremo Coyote V8 5.0 y el EcoBoost 2.3 turbo que apunta a la eficiencia. El interior está inspirado en un jet.
Las opciones de caja son manual de seis marchas o automática de diez velocidades.
Con seis modos de manejo disponible, también se suma un Performance Pack para orientar el uso en las pistas, con frenos más grandes, suspensión aún más deportiva y un diferencial de deslizamiento. También incluye “chiches” como la posibilidad de acelerar en vacío el auto a distancia con la llave.
En cuanto a las tecnologías, llegará con Ford Co-Pilot360, con un completo paquete de asistencias a la conducción, y con suspensiones adaptativas.
Asimismo, el interior está inspirado en la aviación, según informó la marca, con dos pantallas curvas orientadas al conductor, con un instrumental digital en una pantalla de 12,4 pulgadas.
El sistema multimedia SYNC 4 tiene por su parte una pantalla de 13,2 pulgadas. Las butacas y el volante utilizan materiales premium y varían de acuerdo a la versión.
Respecto al diseño exterior, mantiene los rasgos del modelo original de la década del 60. En opciones de carrocería coupé y convertible, los principales cambios se observan en la parrilla, las ópticas y las llantas.
En Argentina se comercializa la sexta generación con la variante Mach 1. El modelo se lanzó en 2016 para posicionarse como referente entre los deportivos de alto rendimiento.
Fuente: Ambito