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La menor proyección de consumo, el pedido de fijar precios y el recrudecimiento del conflicto entre Amenia y Azerbaiyán arrastraron el petróleo.

El petróleo cayó hoy en Nueva York, en una jornada signada por el derrumbe de las materias primas y la fortaleza del dólar, debido a los temores de una recesión que se cierne, como consecuencia de los ajustes de las tasas de interés por parte de los principales bancos centrales del mundo, para luchar por neutralizar la escalada inflacionaria.

El barril del West Texas Intermediate (WTI) para entregar en octubre retrocedió este jueves un 3,7% y se ubicó en u$s85,20. Mientras que el precio del barril del Brent del mar del Norte para entregar en noviembre cayó un 3,4% y se cerró en u$s90,90 el barril.

Los enfrentamientos entre Armenia y el productor de petróleo Azerbaiyán plantearon otro riesgo para los suministros de hidrocarburos. Estos países atraviesa su mayor escalada desde la paz acordada en 2020. Azerbaiyán es un gran proveedor de hidrocarburos y socio estratégico de Turquía. El conflicto se inserta en medio de una suba general de precios del petróleo por la guerra en Ucrania, los topes a los precios que quiere fijar el G7 al petróleo ruso y la amenaza de ese país de cortar todos los suministros si se implementa esa decisión.

Los stocks de las Reserva Estratégica de Petróleo de Estados Unidos aumentaron en 2,4 millones de barriles, por encima de lo esperado.

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, pidió a la OPEP que sostenga el precio del barril por encima de los u$s100 por barril para defender la estabilidad del mercado y un precio equilibrado. Además agregó: “Estamos listos y preparados para cumplir y abastecer el mercado con el petróleo que necesiten de manera estable, segura, en coordinación con la OPEP+”.

Fuente: Ambito