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Las marcas francesas presentaron una herramienta que busca aportar claridad al momento de la suscripción, a fin de evitar futuros malos entendidos.

Peugeot Citroën dieron a conocer su nueva herramienta pensada para aportar más claridad al momento de la suscripción a un plan de ahorro: Pacto Claro.

El Pacto Claro es un documento que presenta información sobre el vehículo a suscribir, datos útiles sobre las cuotas e información en general que las marcas resaltan para asegurar la comprensión del contrato antes de suscribir a un nuevo Plan de Ahorro.

Esta herramienta no reemplaza al contrato de suscripción, sino que anticipa puntos de importancia a tener en cuenta. Incluye los datos del asesor comercial, los datos del área administrativa y del concesionario con su correspondiente asesor de cuenta que los acompañará durante todo el proceso.

¿Cómo funciona Pacto Claro?

El cliente que está iniciando el proceso de suscripción recibirá en su cuenta personal de correo electrónico, un e-mail enviado mediante respaldo notarial, que llevará un link de acceso a su Pacto Claro.

Posteriormente, el cliente será contactado por la automotriz en cuestión para conocer su experiencia en el momento de la suscripción y para verificar si recibió correctamente su Pacto Claro. En caso de no haberlo recibido, la suscripción se considerará incompleta.

Citroën C4 Cactus. Foto: Stellantis.
Citroën C4 Cactus. Foto: Stellantis.

Peugeot Plan representa en el 2022 una participación del 44 por ciento del total de patentamientos de la marca en lo que va del año. La firma francesa creció un 35 por ciento en ventas de enero a julio de 2022 respecto del mismo período de 2021.

Citroën Plan representa en el 2022 una participación del 33 por ciento del total de patentamientos de la marca en lo que va del año. La firma del doble chevrón ha crecido exponencialmente, un 27 por ciento en ventas de enero a julio 2022 respecto de mismo período de 2021.

Planes de ahorro: la vía de escape a los sobreprecios

Los planes de ahorro son históricamente un método muy utilizado por los argentinos para comprar un 0 km. En los últimos años, fruto de la constante y violenta inflación, su demanda venía en baja, pero hoy por hoy vuelven a estar en la mira de los compradores por un motivo central: permiten adquirir un vehículo nuevo sin sobreprecios.

Ocurre que, actualmente, quien quiere comprar un auto nuevo por la vía tradicional se encuentra en los concesionarios con valores que están muy por encima de las listas de precios oficiales de las automotrices. Le pasará a cualquiera que vaya hoy a una agencia con un maletín lleno de billetes.

Como los concesionarios tienen muy pocos autos a su disposición, fruto de las trabas a la importación que impuso el Gobierno de la Nación (es para evitar la salida de dólares) y de la crisis mundial de los microchips (es un elemento clave en la producción que, por la pandemia, está escaseando), piden precios exorbitantes.

En esta situación, la ventaja más importante de un plan de ahorro es que el auto se compra sí o sí por el precio de lista oficial. No hay sobreprecios, dado que los concesionarios están obligados a respetar el valor oficial del modelo en cuestión.

Del otro lado, la primera desventaja del plan de ahorro es que se trata de una herramienta muy sensible al precio. Al estar sumergidos en una economía muy inestable, sin certezas cambiarias y donde el valor de los vehículos se ajusta por encima de los ingresos de la mayoría de los ciudadanos, puede ser un método de riesgo.

 

Fuente: TN