La luz verde de Washington para reanudar los congelados flujos de petróleo hacia el Viejo Continente podría suponer un impulso simbólico para el presidente venezolano Nicolás Maduro.
Las dos compañías energéticas europeas, que tienen empresas conjuntas con la petrolera estatal venezolana PDVSA, pueden contar los cargamentos de crudo como pago de deudas pendientes y dividendos atrasados, dijeron las personas.
Una condición clave, trascendió, es que el petróleo recibido “tiene que ir a Europa. No puede ser revendido en otro lugar”.
Washington cree que PDVSA no se beneficiará financieramente de estas transacciones sin efectivo, a diferencia de las actuales ventas de petróleo de Venezuela a China, señalaron. China no se ha adherido a las sanciones occidentales a Rusia, y ha seguido comprando petróleo y gas ruso a pesar de los llamamientos de Estados Unidos.
Las autorizaciones se produjeron el mes pasado, pero no se ha informado previamente de los detalles ni de las restricciones de reventa.
Según Reuters, Eni y Repsol no respondieron inmediatamente a las solicitudes de comentarios.
OTROS EXCLUIDOS
Washington no ha hecho autorizaciones similares para la petrolera estadounidense Chevron Corp, la india Oil and Natural Gas Corp Ltd (ONGC) y la francesa Maurel & Prom SA, que también presionaron al Departamento de Estado y al Departamento del Tesoro de Estados Unidos para llevarse petróleo a cambio de miles de millones de dólares en deudas acumuladas de Venezuela. Las cinco petroleras dejaron de canjear petróleo por deuda a mediados de 2020 en medio de la campaña de “máxima presión” del expresidente estadounidense Donald Trump, que recortó las exportaciones de petróleo de Venezuela pero no logró derrocar a Maduro.
PDVSA no ha programado que Eni y Repsol tomen ningún cargamento este mes, según un programa preliminar de carga de PDVSA analizado por Reuters.
La vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, tuiteó el mes pasado que esperaba que las aperturas de Estados Unidos “allanen el camino para el levantamiento total de las sanciones ilegales que afectan a todo nuestro pueblo”.
ACERCAMIENTO A CARACAS
El gobierno de Biden mantuvo sus conversaciones de más alto nivel con Caracas en marzo, Venezuela liberó a dos de al menos 10 ciudadanos estadounidenses encarcelados y prometió reanudar las conversaciones electorales con la oposición. Maduro aún no ha acordado una fecha para volver a la mesa de negociaciones.
Los legisladores republicanos y algunos de los compañeros demócratas de Biden, que se oponen a cualquier flexibilización de la política de Estados Unidos hacia Maduro, han criticado el enfoque de Washington hacia Caracas como demasiado unilateral.
Washington mantiene que un mayor alivio de las sanciones a Venezuela estará condicionado al progreso hacia el cambio democrático mientras Maduro negocia con la oposición.
Agencia Reuters
Fuente: Ambito