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En los primeros nueve meses ya se realizaron 6.312 punciones hacia la roca madre. El nivel de actividad está a días de superar los registros prepandémicos. YPFlidera el ritmo del sector.

Si la cantidad de etapas de fractura que se realizan en una formación no convencional da cuentas de la “salud” de la misma, podría decirse que Vaca Muerta está en su mejor estado, dado que no solo faltando un trimestre para terminar el año se está a punto de superar nivel récord que se había alcanzado antes de la pandemia, sino que se perfila para cerrar el año con cerca de 9.000 punciones.

De acuerdo a los registros que elabora el country manager de la compañía NCS Multistage, Luciano Fucello, entre enero y septiembre se sumaron en la formación 6.312 etapas de fractura. Este nivel representa un salto del 92,6% en relación con el nivel deteriorado por la pandemia del año pasado, pero también está apunto de superar el récord de la formación, del 2019 cuando en todo el año se sumaron 6.405 etapas de fractura.

En función de los niveles alcanzados en los últimos meses, que se han ubicado por arriba de las 950 etapas mensuales, el año podría dejar un saldo de punciones muy cercano a las 9.000, y pasando a representar no solo el mejor año desde que se contabilizan las fracturas, en 2016, sino también el que concentre casi un tercio de toda la actividad acumulada.

Este fuerte salto en la actividad de completación de pozos está directamente vinculado con la mayor actividad que ha mostrado en este año la petrolera de mayoría estatal YPF, ya que en los cinco años de estudio de las fracturas, este 2021 es en el que la firma más ha pisado el acelerador.

En detalle, la operadora realizó entre enero y septiembre 3.054 etapas de fractura en las áreas que controla de Vaca Muerta, un 131,3% más que el bajo nivel que marcó en el año de la pandemia, pero también un 0,65% por arriba de lo que era el récord de YPF en Vaca Muerta, que fue de 3.034 etapas completadas durante el 2019.

Etapas de fractura por operadora y año

La segunda empresa que más cantidad de punciones hacia la roca madre realizó en lo que va de este año es Tecpetrol con 678 etapas realizadas hasta septiembre, seguida por Vista Oil&Gas con 614.

La firma Pan American Energy (PAE) sumó 575 etapas de fractura en este plazo, Shell incorporó 542 y Pluspetrol sumó 360.

El ranking de los primeros nueve mese del año se completa con ExxonMobil con 297, Chevron con 84 y Pampa Energía con 35.

El impulso del Plan Gas Ar tiene una gran incidencia en estos resultados, ya que el programa de subsidios a la producción de gas marcó un fuerte repunte en ese sector que venía prácticamente paralizado desde marzo de 2019 y que pasó a representar en los últimos meses el 60% de las etapas de fractura realizadas.

En números

6.405
etapas de fractura es el hito que se alcanzó en todo el 2019 y que pocos días será superado.

No obstante, el posible que el nivel de etapas de fractura para poner en producción pozos de gas natural descienda en lo que resta del año al calor de la temporada de bajo consumo de gas del país.

Pero también ante el escenario internacional más que tentador que está generado la disparada del precio internacional de petróleo que le permite a las empresas que logren exportar obtener hasta 15 dólares por sobre le precio que se les paga por cada barril en el mercado doméstico.

Los cuellos de botella

Como todo nivel récord, los cuellos de botella son una clara amenaza en el horizonte, algunos de ellos más cercanos que otros. En este caso son tres los factores que podrían marcar una desaceleración en este alto nivel de actividad que tuvo en mayo su récord absoluto cuando se sumaron 1.079 etapas de fractura en sus 31 días.

La primera limitación está dada por la cantidad de sets de fractura disponibles en el país. Los ocho equipos son la totalidad de las bombas de alto rendimiento disponibles y ya se está observando cómo las empresas han comenzado a aceitar el proceso de ingreso y egreso de las firmas de servicios de sus campos para compartir en el mismo mes un set de fractura.

La figura se asemeja a la de un equipo pivotante, que se redirecciona en función de la demanda, y corresponde a uno de los dos sets que posee la firma Schlumberger.

El dato

3.054
punciones lleva realizadas a septiembre YPF, es el récord absoluto para la operadora.

Las dotaciones se completan con tres sets de Halliburton, uno de Calfrac, uno de Weatherford y el reciente equipo activado por Tenaris tras la compra de los activos de Baker Hughes.

El segundo cuello de botella es la capacidad de los gasoductos que unen Vaca Muerta con el resto del país, que podrían generar un tope al nivel de actividad al mantener la formación limitada a los 88 millones de metros cúbicos que las líneas pueden hoy transportar.

En tanto que el último cuello de botella es la cantidad de nuevos pozos listos para fracturar, un cúmulo que se ha ido reduciendo en los últimos meses, y que incluso podría generar un problema en el corto plazo si no se incrementa y nivela la velocidad de perforación con la fractura ya que si bien la completación se encuentra en niveles récord, la cantidad de rigs activos sigue aún por debajo de los niveles prepandémicos.

 

 

Fuente: Rio negro