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Esperan batir varios récords de velocidad.

Bugatti durante años tuvo el récord del auto de serie (es decir a la venta al público) más rápido del planeta, con su modelo Veyron. Esta vez el plan es diferente, pero la marca francesa quiere dejar en claro que es una de las grandes en el club de los autos más veloces del mundo.

Para eso ya tiene casi listo el Bolide, un hypercar, es decir, un auto pensado para ofrecer el máximo rendimiento deportivo, inicialmente solo dentro de un circuito.

16 cilindros y más de 1800 caballos de fuerza.
16 cilindros y más de 1800 caballos de fuerza.

Recientemente la compañía dejó ver algunas imágenes de cómo luce la criatura, que podría intentar batir el récord del Porsche 919 EVO en el mítico circuito alemán de Nürburgring.

Inspirado en las 24 Horas de Le Mans, el Bolide fue creado sin ningún tipo de límite a la hora de diseñarlo. Su único objetivo es el rendimiento deportivo.

Volante digno de un auto de competición.
Volante digno de un auto de competición.

El motor es un 16 cilindros de 8 litros y cuatro turbos con los que alcanza los ¡1850 caballos de fuerza y 1850 Nm de torque máximo! Una bestialidad.

A diferencia del Chiron, el modelo “de calle”, aquí los turbos son de mayor tamaño y tanto la admisión como el escape fueron rediseñados. Hay nuevos intercoolers, tres radiadores de aceite y frenos con componentes de carbono y titanio.

Fue construido sin restricciones. El único objetivo es el máximo rendimiento.
Fue construido sin restricciones. El único objetivo es el máximo rendimiento.

Otro punto importante es su peso, de apenas 1240 kilos, muchísimo menos que las casi dos toneladas del Chiron. Este punto es especialmente importante en lo que hace a agilidad en pista.

Su diseño intimida, con llantas de 18 pulgadas y cuatro enormes salidas de escape que se “encuentran” en el centro de la parte posterior, donde también destacan el alerón, el difusor y las cuatro luces LED. Pronto lo veremos en acción.

Inspirado en las 24 Horas de Le Mans, pesa apenas 1250 kilos.
Inspirado en las 24 Horas de Le Mans, pesa apenas 1250 kilos.