z.system

Los directivos de Cecha expresaron su preocupación al ser excluidos del listado de “actividad crítica”. “Estamos muy lejos de pasar la crisis y ahora nos cierran esta puerta”, dijo Gabriel Bornoroni.

La Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines (CECHA) remarcó que, ante la crisis por la pandemia, tres de cada cinco estaciones de servicio “trabajan a pérdida” y advirtió que “la situación puede ser peor” si son excluidas del programa de Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP).

La Confederación que agrupa a las 4.800 estaciones de servicio del país mostró su “preocupación por una situación que puede llevar al cierre de cientos de estaciones”.

“Hoy tres de cada cinco trabajan a pérdida y la situación puede ser peor si son excluidas del programa de Asistencia al Trabajo y la Producción”, apuntó la entidad que dirige Gabriel Bornoroni.

De acuerdo a datos elaborados por la consultora Economic Trends, una estación de servicios con 13 empleados necesita vender al mes unos 300,000 litros de combustible para alcanzar su ‘punto crítico’, es decir, el mínimo para cubrir todos los costos. Actualmente el 67,6% de las estaciones de servicio del país registró en el último mes volúmenes de ventas de combustibles líquidos por debajo de ese nivel.

“La situación de las estaciones de servicio en el país sigue siendo crítica, y no muestra signos de mejorar en el corto plazo”, consideró Cecha en un comunicado al que accedió Ámbito.

De este tema se habló en la reunión virtual entre los dirigentes estacioneros y el secretario de Energía, Darío Martínez, de principios de octubre. Según informó este medio en ese momento, los dueños de las estaciones solicitaron al funcionario como medida de auxilio, una mejora en la accesibilidad al cobro de los ATP, dado que por algunas “restricciones” solo el 44% de los empresarios del rubro pudieron acceder a la ayuda estatal.

La Confederación de Expendedores de Hidrocarburos (CECHA) argumentó que "la caída de la circulación a nivel masivo, sumado a las restricciones por el Covid-19 derivaron en una nueva normalidad cuyos volúmenes de ventas son angustiantes".

La Confederación de Expendedores de Hidrocarburos (CECHA) argumentó que “la caída de la circulación a nivel masivo, sumado a las restricciones por el Covid-19 derivaron en una nueva normalidad cuyos volúmenes de ventas son angustiantes”.

A ese cóctel de caída de volúmenes se suma un aumento de los costos operativos, según alertaron desde Cecha. En el caso de los salarios, la equivalencia entre salario básico y litros de nafta súper se incrementó un 14,3% entre marzo de 2019 y marzo de 2020, pasando de 651,1 a 744,3 litros que hacen falta vender para pagar un sueldo. Esta equivalencia se incrementó a 814,4 litros en abril de 2020. “Esto implica la necesidad de vender volúmenes cada vez mayores. Sin embargo, desde marzo los volúmenes vendidos se redujeron fuertemente”, cierra el informe.

“Durante meses los estacioneros que trabajaron a pérdida fueron recurriendo a distintas formas para mantener a flote el negocio, tales como sacar créditos, poner dinero de su bolsillo e incluso vender bienes personales para no atrasarse con el pago al personal”, sostuvieron en el parte de prensa. “La quita del ATP cae en un momento en el cual el sector ya casi no tiene recursos. Está con las reservas en rojo”, subrayó.

Los estacioneros le enviaron una carta al ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulkas, para solicitar que los sigan considerando “actividad crítica”. El funcionario les respondió por mail el 2 de noviembre con la posibilidad de acceder a fondos con créditos a tasa subsidiada, pero confirmando que están afuera del ATP 7. Los empresarios le volvieron a escribir una nota, donde recuerdan el 21,4% de costo adicional por la firma de la paritaria 2020 y remarcaron que ante el bajo nivel de ventas, ni si quiera pueden “desarrollar” otras unidades de negocios como minimercados y ventas de accesorios para vehículos.

“Para nosotros es una situación imposible. Veníamos advirtiendo que no tenemos mucho más resto, y esto profundiza el cuadro. Nosotros trabajamos día a día para que la pandemia termine sin ninguna estación cerrada, pero hoy ya no lo podemos garantizar. Estamos muy lejos de pasar la crisis y ahora nos cierran esta puerta”, concluyó Gabriel Bornoroni.

 

Fuente: Ambito