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El directivo anticipó que entre octubre y noviembre estarán en funcionamiento los parques eólicos del Nodo Madryn, que aportarán 160 MW a la red eléctrica.

EconoJournal inauguró su Ciclo de Entrevistas con Walter Lanosa, el CEO Genneia, una compañía líder en generación de energías renovables pero que también es un jugador de peso en el mercado eléctrico en general. Durante la charla, el directivo destacó que a pesar de los contratiempos y los protocolos que obliga la cuarentena, los 16 centros operativos  que posee la compañía siguen funcionando normalmente y del mismo modo se continúa con las obras de los parques de energías renovables que están en construcción. “Desarrollamos protocolos específicos,  haciendo que la mínima cantidad de personal de cada unidad esté operando al mismo tiempo. El objetivo es evitar que el contagio de alguno de nuestros colaboradores genere efecto dominó, que haga que en el corto tiempo la central, por falta de recursos humanos, pueda dejar de operar. Todos los días hacemos un censo en el estado de salud y  nuestro equipo de medicina industrial está conectado con cada uno de nuestros colaboradores. Si es necesario, hacemos los test para determinar si hay potencial contagio. De esa manera preservamos que todos los días Genneia siga operando”, afirmó Lanosa.

Con respecto a las obras que lleva adelante Genneia en los parques eólicos, el directivo indicó que actualmente está trabajando la mitad del personal que lo hacía antes de iniciarse la cuarentena y que para evitar el traslado permanente desde sus hogares han acercado a la gente lo más posible a su lugar de trabajo. “Nuestros colaboradores están haciendo un gran sacrificio porque están lejos de sus familias. En algunos casos, como nos pasó en Pomona, cuando la ciudad de Choele Choel quedó aislada por un foco importante de contagio, tuvimos que trasladar a todo el personal que vivía allí y ubicarlo muy cerca del parque. Es una señal clara del sacrificio de abandonar a sus familias para poder seguir prestando tareas. Y la verdad que eso es muy loable”, destaca.

En la actualidad, Genneia tiene concentrados todos sus proyectos de construcción correspondientes al Plan Renovar 2 en el Nodo Madryn. Por un lado está asociado con Pan American Energy para la construcción de 160 megaswatts (MW). A su vez, desarrolla un proyecto propio de 26 MW , destinado al Mercado a Término de Energías Renovables. “Son proyectos que deberían haber visto la luz en abril pero que,  producto del cepo cambiario de agosto de 2019, generó un atraso fundamental. No podíamos hacer los pagos a nuestros proveedores en el extranjero, a pesar de tener fondeado los proyectos.  Y después apareció el tema del covid que dificulta y ralentiza los proyectos. Pero estamos avanzando aun en este contexto. Estimamos que estos proyectos tendrán su luz en octubre o noviembre, lo cual es una muy buena noticia”, aseguró Lanosa.

Genneia acaba de cumplir ocho años de vida y logró posicionarse como compañía líder en renovables.  Resulta por lo tanto un buen momento para que Lanosa haga un balance los logros conseguidos por la compañía. “Genneia representa hoy más del 20% de la energía renovable de la Argentina y más del 30% de la eólica. Ha cumplido hitos como poner en macha el primer parque eólico de envergadura de la Argentina. Hemos sido los pioneros en la venta de certificados de reducción de emisiones. Es decir, que la empresa siempre ha trabajado en el tema del desarrollo y la innovación. Hemos invertido en renovables  u$s  1200 millones. Hoy Genneia tiene 600 MW en producción y está construyendo otros 160, con una lógica clara de constituirse en el líder de las energías renovables, porque confía que en el  futuro el sector va a seguir siendo el vector de crecimiento de la generación”, asegura el directivo.

Con respecto al futuro inmediato y ante la incertidumbre que genera el actual contexto de la pandemia, Lanosa señala que “el desafío que se nos plantea hoy es que tenemos que pasar de ser primeros a ser los mejores. Tenemos un centro de control de todos nuestros centros operativos renovables que nos permite visualizar la situación en cada uno de los parques y adoptar las mejores decisiones para el mejor despacho posible. Estamos desarrollamos algo que es novedoso, que es ofrecerle a nuestros colegas competidores un servicio de mantenimiento. Queremos ser una compañía dentro del sector de generación que abarque todas las actividades posibles, porque creemos que esa eficiencia nos va a permitir en el futuro anticiparnos y tener mayores capacidades para competir con empresas mucho más grandes que la nuestra”.

Lanosa tiene una visión altamente positiva de los logros obtenidos con el desarrollo del Programa Renovar 2. “El hecho de ver que hoy en Argentina hay 3 más de gigas de energía renovable, es todo un éxito”, afirma. En el pasado Argentina intentó desarrollar energías y por alguna razón el proceso siempre quedó suspendido. Hoy es una realidad. Está claro que en una matriz energética que hoy tiene cerca de 40 gigawatts (GW), 3 parece mínimo. Sin embargo, el avance es notorio. Se podría haber hecho mejor. Pero lo real es que en Argentina imaginar procesos económicos sin crisis profundas cada cinco años se hace cada vez más difícil. La medida entonces desde la que uno tiene que analizar esto es despejando las variables de contexto. Desde ahí es donde creo que el programa ha sido exitoso. Lo que viene, creo que tiene que ver con volver a repensar qué compromisos tiene la Argentina a nivel de reducción de emisiones. Deberíamos imaginar que las energías  renovables pasen a ser un factor decisivo de la matriz energética. Primero, porque son competitiva. Segundo, porque si hay interés de desarrollar la industria localmente,  tiene que haber un plan que garantice a esa industria una continuidad en el tiempo”, añade.

Frente al inminente lanzamiento del Plan Gas 4 con el que el Gobierno apunta a estimular la producción, el CEO de Genneia no descarta que puedan darse oportunidades de negocio para la compañía. “En un país que tiene la cantidad de gas que tiene Argentina bajo su suelo, no podemos decir que esto no nos interesa. Lo que sí es cierto es que a un valor a 3,5 dólares por MMBTu, la energía renovable puede competir. Hay todo un campo que tiene que ver con eficiencia del lado térmico. Me parece que hay algo que hay que revisar en la matriz energética argentina y es que tenemos unidades térmicas obsoletas, poco eficientes y de alta contaminación, que en una planificación debería tener un fin para su historia productiva.  A u$s 3,5 creo que hay un espacio para que la energía renovable pueda tener en el futuro una inyección mayor que la térmica”. En ese sentido, Lanosa considera que en el corto plazo se pueden llegar a desplazar hacia energías renovables 3 GW de lo que hoy se producen desde unidades térmicas obsoletas.  “Y si queremos ir hacia un ciclo virtuoso,  donde realmente busquemos eficiencia y reducción de contaminación, podemos llevarlo hasta 7 GW”, estima.

Acerca de la dicotomía que en algún momento se planteó  como prioridad de desarrollo entre las energías renovables o el de los hidrocarburos a partir de Vaca Muerta, Lanosa cree que “la antinomia se generó por la cuestión del acceso al capital. El problema argentino es justamente su acceso al capital. Entonces cuando éste se vuelve limitado nos peleamos todos por la  misma torta”. Pensando en el futuro, el directivo entiende que “tenemos que hacer que el desarrollo de Vaca Muerta sea lo más eficiente posible para que el recurso que tenemos pueda ser explotado y que genere un beneficio para el país. Teniendo en cuenta que el ciclo de vida de los combustibles fósiles está llegando a su fin, si seguimos debatiendo cómo explotamos Vaca  Muerta, en el momento que estemos decididos a hacerlo corremos el riesgo que el ciclo de gas haya pasado de moda. Por lo tanto, no puedo más que adherir que Argentina tiene que generar las condiciones para que  los recursos de  Vaca Muerta salgan a la luz y se generen beneficios para quien lo desarrolla. Pero eso no implica que anulemos el potencial de las renovables. Tenemos 20 años para producir energía de Vaca  Muerta a buen precio y tenemos 50 años para hacer energía renovable de manera competitiva. Requerimos que haya un plan que sea política de Estado, imaginando que con los recursos que tenemos, sea en gas, vientos y radiación solar, los explotemos de la mejor manera posible y convertir a Argentina en una potencia energética. Tenemos esos recursos y es una ventaja competitiva respecto de cualquier otro país de Sudamérica”, concluye.

 

 

Fuente: Econojournal