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Los grupos ambientalistas del sur entrerriano debatieron en Concepción del Uruguay e Ibicuy sobre la extracción de arena para el fracking.

El encuentro fue en el salón de AGMER, donde se congregaron organizaciones y grupos ambientales como Fundación Cultura Ambiental Causa Ecologista (CAUCE), el Foro Ecologista de Paraná, Asamblea Ciudadana Ambiental de Concepción del Uruguay y de Concordia, Por una Vida sin agrotóxicos, Aves Ibicuy, vecinos autoconvocados, docentes, concejales actuales y futuros, medios de comunicación y público en general.

Durante el cónclave se realizó una breve exposición sobre el seguimiento y monitoreo que viene realizando del proyecto de extracción de arenas silíceas para el fracking, se repasaron criterios, reclamos, sugerencias e información acerca de los daños que causa el impacto de las areneras en todos los niveles en las comunidades.

De los ríos entrerrianos a Vaca Muerta

El auge de la explotación de gas y shellgas no convencional en Vaca Muerta generó una demanda creciente de la arena del río por tener un gramaje más fino que la del mar y su traslado al sur del país podría generar un impacto ambiental y en la salud.

Desde los puertos de Campichuelo cerca de Concepción del Uruguay, de Diamante e Ibicuy se venden unos 400 camiones por día para el polo petrolero de Vaca Muerta. Por día, entonces, salen de la provincia entre 5 y 8 millones de kilos de arena, comentó Daniel Ballester, integrante de la Asamblea Ciudadana de “La Histórica” y explicó que los procesos causan daños en el ecosistema y en la salud de los operarios.

Más de 300 camiones por día

“La mayor cantidad de arena sale desde Ibicuy porque tiene más canteras habilitadas por la secretaría de Ambiente de Entre Ríos. Desde Campichuelo salen 100 camiones por día, pero desde Ibicuy son más de 200 de las 5 canteras actuales y ahora ya hay dos o tres más en pedido de habilitación”.

Estimativamente, con la carga de 50 camiones se inyectan los pozos donde se extrae shale.
Estimativamente, con la carga de 50 camiones se inyectan los pozos donde se extrae shale.

Ballester explicó que “el proceso arranca con la extracción del río, luego viene el lavado y tercero el filtrado de la arena para tener la calidad y el tamaño adecuado para las operaciones hidráulicas. El lavado de la arena incluye el uso de floculante para eliminar rastros de barro y son peligrosos neurotóxicos con consecuencias gravísimas para la salud y deben ser evitados a toda costa porque con el tiempo podrían derivar en cáncer de pulmón”.

Es ilegal, dicen los ambientalistas

Entre Ríos es uno de los distritos que se declaró “libre de frackin”. Al respecto, sostuvo que la venta de arena (especialmente para YPF) “va en contra de las leyes provinciales”. “El tamaño de la arena que se pide es de 2.5 micrones, más chiquitas que un pelo, y es volátil por lo que se inhala y termina en los pulmones generando cáncer”, precisó el ambientalista.

El economista Julio Ibañez de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco indicó que desde 2016 aumentó mucho la compra de arena local. “El mayor productor nacional de arenas es Entre Ríos, que hoy provee algo así como el 50 por ciento de las que utiliza la explotación”, señaló en una exposición en esa universidad.

En la costa del Paraná, en las inmediaciones de la localidad Aldea Brasilera, una subsidiaria de Ferrum, Cristamine, es la principal compañía del rubro. Recientemente también hubo anuncios sobre la posibilidad de extraer la arena de sílice en Gualeguay. En cuanto a la importación, el especialista indicó que el agente sostén proviene fundamentalmente de China, Estados Unidos y Brasil.

“El shale es arena dependiente”

La fractura hidráulica es un método de extracción de hidrocarburos más agresivo que el que se utiliza en los yacimientos convencionales. Consiste en realizar perforaciones verticales y horizontales en las que se introducen a presión millones de litros de agua, químicos y arenas. Ese compuesto resquebraja las rocas del subsuelo y, cuando el líquido se retira, la arena impide que las grietas vuelvan a cerrarse, lo que permite que los fluidos migren hacia la superficie de forma sostenida.

Por el objetivo que poseen, el sector hidrocarburífero denomina “agente sostén” a tres componentes: arena natural, resinada y cerámicos artificiales que soportan mayores presiones.

Si bien las cantidades son variables se estima en 1500 toneladas lo que se inyecta en cada pozo y se ha comprobado que a mayor cantidad se obtienen mejores rendimientos. Un camión estándar puede cargar unas 30 toneladas, es decir que se necesitan aproximadamente 50 para cada pozo. Por estas condiciones es que “el shale es arena dependiente”, según los especialistas.

Fuente: Reporte 2820.