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Son el indicador clave del ritmo de actividad en la formación no convencional. Este mes sumaron apenas 312 punciones, casi un 54% menos que lo que registraron antes del DNU 566 de congelamiento del barril.

Los efectos negativos en la industria petrolera del Decreto de Necesidad y Urgencia 566/19 se siguen acumulando y reflejan la crisis que atraviesa desde mediados de agosto Vaca Muerta. El último informe sobre la cantidad de etapas de fracturas, el principal indicador del ritmo de trabajo en los yacimientos, reveló que las punciones cayeron un 53,84% en comparación con agosto, cuando a mitad de mes se aplicó el congelamiento.

Los datos recopilados por la firma NCS Multistage dan cuenta de una notable parálisis en Vaca Muerta, dado que las 312 etapas de fractura que se alcanzaron en octubre no sólo contrastan claramente con las 676 que se habían registrado en agosto, sino que además marcan una clara línea en picada si se tiene en cuenta que la primera caída se registró en septiembre con 508 etapas completadas.

Pero además hay dos datos que se destacan en el informe, dado que por un lado las 312 etapas de fractura registradas a lo largo del mes que termina hoy indican que sólo se fracturaron unos cinco pozos en la formación no convencional en donde el mes pasado ya eran más de 100 los pozos que se habían perforado pero al no fracturárselos y completárselos, nunca entraron en producción.

El otro dato que se desprende del informe mensual es que sólo cuatro operadoras continuaron con su actividad y a ritmos muy distintos. En agosto eran seis las empresas que fracturaron sus pozos. Pero desde el congelamiento las firmas Pluspetrol, Shell y XTO – ExxonMobil, dejaron de sumar fracturas.

Las únicas firmas que sumar actividad en octubre fueron Total, Pan American Energy (PAE), Pampa Energía (que realizó sólo 3 etapas de fractura) e YPF que con 217 etapas completadas volvió a concentrar cerca del 70% de la actividad.

En el caso de YPF se advirtió que se registraron problemas de interferencias que obligaron a la suspensión de las operaciones de fractura en un área y que llevaron a que complete una menor cantidad de punciones en el mes.

Una de las razones centrales de este parate en la actividad es que las firmas pasaron de vender sus barriles a 48,90 dólares a hacerlo a 37,80 dólares en función de la aplicación no sólo de un congelamiento para el valor prefijado del crudo sino también porque se impuso un dólar congelado que hoy está en 50 pesos.

A este indicador de la crisis, en la que también incide el control de capitales, se suman la baja de 13 equipos de perforación en los últimos 60 días que marcan una caída del 30%, y la suspensión de cerca de 1.500 trabajadores petroleros ante la menor actividad en los campos.

El gobernador de Neuquén, Omar Gutiérrez, se reunió hoy con el presidente electo Alberto Fernández con el objetivo de lograr que se cumpla con el descongelamiento del precio del barril y de los combustibles que, por el DNU 566 debería dejar de aplicarse el próximo jueves 14 de noviembre.

La salida de este congelamiento implicará inevitablemente un incremento en el precio de los combustibles, aunque desde la industria se estima que el incremento se realizaría en forma paulatina, siendo la primera suba no mayor al 5%.

 

Fuente: Rio negro