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Según medios vinculados a servicios de inteligencia en Medio Oriente, expertos de Estados Unidos están estudiando las imágenes de satélite y otras pruebas de video para rastrear la fuente en Irak del ataque a instalaciones petroleras de Arabia Saudita.

Según medios vinculados a servicios de inteligencia en Medio Oriente, expertos de Estados Unidos están estudiando las imágenes de satélite y otras pruebas de video para rastrear la fuente en Irak del ataque a instalaciones petroleras de Arabia Saudita.

Y su primer descubrimiento fue que misiles del tipo de crucero, en lugar de drones, alcanzaron las refinerías de petróleo sauditas y un yacimiento, ambos en provincias orientales del reino. Según el sitio Debka File, los misiles fueron lanzados desde una base de milicias shiítas iraquíes, a pesar de las negaciones de Bagdad.

Las fuentes informan de videos sauditas que muestran múltiples misiles de crucero que vienen del norte y se dirigen a través de la frontera hacia los objetivos, en el este de Arabia Saudita. Por un lado, se vio claramente un misil volando sobre el principal cruce fronterizo de Hafar al-Batin que es derribado por un misil de defensa aérea saudita, aunque los funcionarios no han dicho nada sobre la intercepción. Debka muestra dos imágenes de lo que serían los restos de misiles de crucero iraníes derribados cerca de la refinería saudita de Abqaiq.

El ataque representó una escalada en la agresión iraní contra Arabia Saudita. Tanto Estados Unidos como Arabia Saudita poseen los recursos militares para una represalia comparable contra Irán. Sería difícil que el reino saudita dejara pasar una agresión de este calibre, que dañó el 50 por ciento de su producción y destruyó valiosa infraestructura de su mayor complejo petrolero. Según fuentes regionales, Trump puede contenerse por unos días para dar a conocer los resultados de las investigaciones sobre el ataque. Washington enfrentará una fuerte presión para hacer públicos esos hallazgos, sobre todo porque el ataque fue probablemente el primero de una nueva ola de agresiones contra objetivos petroleros.

Fuente: Lacapital