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La firma alemana analiza el cambio de uno de sus modelos más populares, mientras que el gigante japonés planea desembarcar en una nueva categoría.

Tras un anuncio realizado por la Secretaría de Desarrollo Económico de San Pablo (Brasil), en las próximas dos semanas el gobernador Joao Doria viajará a Alemania para anunciar la inversión de una “empresa alemana” del rubro automotor, y luego continuará con su gira por Asia para realizar tareas similares con una compañía japonesa.

Según reveló Automotive Business, las inversiones en conjunto deberían rondar los 500 millones de dólares, y todo indica que tanto Volkswagen como Toyota, se encargarán de realizar los anuncios entre agosto y octubre.

En el caso de la compañía alemana, se espera que para fines de este mes se oficialice el aporte en la planta brasileña de Taubaté, debido a que durante el último tiempo tanto Sao Bernardo do Campo (fábrica donde se produce el Polo y el Virtus), como Sao José dos Pinhais (lugar de producción del nuevo T-Cross), fueron las terminales que se llevaron todas las miradas a causa del lanzamiento de la nueva plataforma MQB, sumado al lanzamiento del SUV de la firma de Wolfsburgo.

Actualmente, en Taubaté se produce el Gol, Voyage y Up, aunque se espera que el hatchback de segmento B se convierta en el indicado para ser reemplazado, al menos en un principio. A diferencia del modelo actual, todavía no se sabe si mantendrá el mismo nombre, pero la estructura sería completamente distinta.

La plataforma MQB también podría llegar a la planta de Taubaté para fabricar al SUV basado en el Polo, que se posicionaría por debajo del inédito y conocido T-Cross.

Entre septiembre y octubre, se espera que Toyota realice el anuncio sobre una nueva inversión en la planta de Sorocaba para el inicio de la producción del primer SUV brasileño de la compañía, que comenzaría su fabricación a partir de 2021.

Hasta el momento, se sabe que el utilitario deportivo elegido sería el Rush (Ver Nota), un vehículo con la misma estructura que el Daihatsu DN-Trec, que al menos en Brasil, la duda se encuentra en la selección de la plataforma, ya que podría adoptar la del Yaris o la TNGA (Toyota New Global Architecture), la misma que posee el nuevo Corolla (se lanzará en el país vecino en septiembre), y el SUV C-HR.

 

Fuente: Parabrisas