z.system

Las restricciones que rigen para garantizar el servicio de gas en las redes domiciliarias generan múltiples quejas

El frío no da tregua y las restricciones para adquirir GNC mantienen en jaque a los usuarios de ese combustible: particulares, taxistas y remiseros que deben dar infinitas vueltas y soportar colas eternas a la hora de cargar el tanque. Sólo unas pocas estaciones de servicio que expenden el gas comprimido en la Región disponen de cupos más flexibles para la entrega mientras que la mayoría de las bocas, quizás con mayor demanda y una oferta muy limitada en metros cúbicos de fluido, dejan de atender esa venta durante el día muy temprano.

“Por el momento isla cerrada”, informaba con un cartel ayer a la tarde la estación de servicio de 13 y 71 en el sector de venta de GNC. Tampoco disponían del combustible, después de las cinco de la tarde, en la boca de expendio de 10 y 72. En esos lugares, igual que en muchos más de la Ciudad que llegaron en pocas horas al límite que establece el cupo, se repetían las escenas de los vehículos llegando al playón y saliendo a los pocos segundos, con la clásica cara de decepción del conductor en su interior.

Fuente: El Día